lunes, 26 de febrero de 2018

Panteras

Libro formato 23 x 16 cm, 124 páginas blanco y negro, tapa y retiraciones a todo color, encuadernado rústico. Guión: Eduardo Mazzitelli. Dibujo: Enrique Alcatena. Edita: Purple Books (https://www.purplebooks.com.ar/) Facebook Oficial: (https://www.facebook.com/PurpleBooksOficial/)
Ninguna imagen digitalizada, foto o escaneo le hace
verdadero honor a la tapa de este magnífico ejemplar.
¡No somos dignos, Purple Books!

¿Qué onda?
No contentos con estar consolidándose como autores y como autoeditores con un gran nivel de edición y una seriedad a toda prueba, las mentes maestras de Purple Books (Scarano, Sciamarella y el prolífico Lea Caballero, quien oficia de director) se agenciaron a dos verdaderos grossos de la historieta argentina y les editaron un libro a su altura que, créanme, en sus detalles de calidad le pasa el trapo a más de una editorial de las que gozan de más historia editando comics argentinos. Este libro, que yo conseguí recién este 2018, por colgado, más que nada, salió a principios de 2017, por lo que es imposible decir que se cuelga de las tetas del estreno de Pantera Negra (2018), la peli del universo cinemático de Marvel, pese a lo que puede sugerir el retraso con el que la estoy reseñando.
Eduardo Mazzitelli (el guionista de historietas, no el histórico director de cámaras de Canal 13) y Quique Alcatena han colaborado en numerosas ocasiones, con piezas como Rakshassas y Kinnara, Shankar (editado por Loco Rabia), El Sable y el Laúd (D+I ediciones), Metallum Terra, La Estirpe Maralha o Yanayag (Napoleones Sin Batallas), y ahora suman otra obra conjunta en este tomo perfectamente editado por Purple Books. Calidad de impresión (y hay que sacar bueno al laburo de Quique, con esos hermosos negros plenos, y los medios tonos totalmente manuales, hechos con prolijas rayitas, lo que lo emparenta con el mejor Brian Bolland, al menos en lo que a mi modesta opinión respecta) y dos particulares detalles de lujo en la tapa que le confieren al tomo un nivel de edición muy infrecuente en el mercado local: Las letras del título y los ojos del personaje, en la tapa, y una escena destacada y
el isologotipo de la editorial, en la contratapa están impresas en satinado, mientras que el isologotipo y nombre de la línea de producto del ejemplar (Purple Books Masterworks) están impresos en tinta dorada. Si eso no es tratar al producto y a los autores con respeto y admiración, cerremo' todo y vamolón!
Por todo lo dicho y aunque Lea Caballero es más de una década más joven que yo, tengo que decirlo: cuando sea grande, quiero ser como él.

¿De qué se trata?
No, no es T'chala, es una verdadera fusión
hombre-pantera, no un mero disfraz hi-tech.
Quique explica en el prólogo las influencias causaron la concepción de las historias de este libro, las historietas "Tarzán", y "La Hermandad de la Lanza". Especialmente se esa última es de donde más abrevaron los autores, con la firme intención de reflejar toda la magia, la intriga y la aventura épica en el África profunda.
En una movida que me recuerda a El Libro de las Tierras Vírgenes, de Rudyard Kipling, el tomo contiene una historia principal, la que otorga el título al libro, compuesta de varios capítulos, y tres historias cortas, todo englobado en la serie "Timbuba, el mundo perdido".
PANTERAS narra el camino de pérdida, maduración, venganza y descubrimiento de Nabadru, el hijo de un brujo que muere misteriosamente en el ataque de una orden secreta de guerreros pantera. A través de varios episodios, veremos crecer a Nabadru, planear su venganza, mezclarse con sus enemigos y llegar a lugares inesperados en un camino lleno de intrigas y engaños donde nada es lo que parece.
¿Sabés qué es dibujar bien? Acá tenés todo
lo que está bien en el comic. Bello, dinámico,
inteligible, claro, bien compuesto, y es apenas
el recorte de una viñeta dentro de una página..
EL REY TUVO UN AMIGO
El líder de un próspero reino africano tiene una reina que se aburre. La visita deseada pero subrepticia de un viejo amigo del rey, un poderoso guerrero al que el rey le salvó la vida antes de llegar al trono, modifica por completo la vida de la reina, deseosa de una aventura.
EL ESCLAVO
Un indómito esclavo, fuerte e invencible, esperanza con su presencia a esclavos y con temor a sus opresores. Es un bestial esclavo que no se somete y que no conoce el dolor, y los esclavistas no quieren matarlo por temor a que se torne leyenda y cause levantamientos entre los esclavos. Hartos de esta situación, los opresores envían a su mejor general, un veterano de mil batallas que nunca conoció la derrota, para hacerlo caer. Ambos conoceran en el enfrentamiento aquello que desconocían.
LA CANCIÓN DE MURA WATO
El joven hijo de un guerrero encuentra una relación entre una melodía y la felicidad, y dedica su vida a buscarla a través del estudio de la ciencia y la magia, sin resultados, y más necesitado de saber su origen a cada ocasión en que la melodía aparece como un mantra que trae felicidad. Así seguirá a través de las muchas situaciones felices y tristes que enfrente, buscando el origen de esa música, hasta el fin (de la búsqueda, de su vida, de ambas).
¿Quién debería comprar PANTERAS?
Alcatena dejó clara la referencia: historias de aventuras, de magia y de épica ambientadas en la profundidad de África. ¿Tarzán? Sí, un poco. ¿Hermandad de la Lanza? Bastante. No es vana la referencia al libro de Kipling que, aunque ambientado en la India, tiene su paralelo en selva, misterio, aventura, misticismo e intrigas.
Lo que diferencia a esta obra de las de los dos humanos perdidos y criados por animales (Mowgli y Tarzán) es el total protagonismo de los humanos y el rasgo distintivo que unifica a todas las historias de esta serie: NADA, pero NADA NADA es finalmente lo que parece.


MAX KING

domingo, 18 de febrero de 2018

Lu Comics Nº 3 Madre de Pingüinos

Fanzine formato A4 doblada al medio (15 x 21 cm) 20 páginas papel obra blanco y negro + tapa papel ilustración a todo color, sin retiración, encuadernado a grampas. Autora: Lucía Lanzani (http://lucomicsenesp.tumblr.com/). Edita: LuComics (http://lucomics.com/).
No se dejen engañar por el trono de espadas.
La verdadera amenaza es la ternura de ese pingüino,
capaz de entibiar el más frío corazón de un white walker.
¿Qué onda?
Lucía Lanzani es una muy joven traductora de inglés en sus veintes que entre vicios como las series de TV, los videojuegos y rascarse el higo, también dibuja. Su dibujo no es ni detallado ni exquisito, en la tapa uno sabe que es el trono de espadas porque la forma es muy icónica, pero justamente ahí, y en su capacidad para observar con humor su vida diaria es donde radica el verdadero fuerte de esta autora, y lo que me hizo seguir comprando su tercer número luego de esperar pacientemente a encontrarla con material nuevo en Dibujados, tras devorar con fruición y grata sorpresa sus dos primeros números.
Chequeando el material de su sitio web y blogs originales, me topé con una noticia que me hizo tenerle a esta chica un especial aprecio: en mayo de 2016 su mamá falleció. Entendí mucho su anuncio porque, además, ese mismo año yo perdí a mi mamá también, y tenía internado a mi papá, que fallecería el mes siguiente, mientras Lucía perdía a su madre.
No sabés cómo te entiendo, Lu.

¿De qué se trata?
Básicamente se trata de las tiras cómicas que Lucía publica en su blog. Están protagonizadas por ella, sus padres, su novio y sus amigos, y por un único personaje que no tiene su paralelo en la vida real, su pingüino mascota, Cuddles. Se diría que es humor costumbrista, si no hubiese espacio para referencias pop de la TV, el cine y los videojuegos. Zombies, Halloween, Pokemon, Kirby, Harry Potter, se mezclan con afiladas observaciones sobre las contradicciones internas, los alumnos que no dan bola, las deformaciones profesionales del que trabaja con el idioma, sea traductor o profesor, la adicción a la computadora, los viajes en subte o los desafíos de la vida adulta en una persona joven (si los 30 son los nuevos 20, los 20 son una extensión de la adolescencia, pero con presupuesto propio, porque ya laburás y no te estarían manteniendo tus viejos).
Todo eso recibe la aguda mirada cómica de Lucía, con un dibujo que, sin descollar, cumple el objetivo básico de toda faz gráfica: que se entienda lo que se ve. Y que se entienda, más allá de que uno siempre espera manos con dedos y algo más de ayuda en las poses expresivas, en estos tiempos en que el humor en internet es gráficamente deficiente y va de figuras deformes sin copyright (porque nadie querría hacerse cargo de esos monigotes) a simples palitos (stick figures), Lucía hace un muy buen trabajo, y la prueba está en la última página, en la tira donde Lucía se encuentra con Hermione, y con tan simples y escasas líneas, Lucía dibuja un uniforme de Hogwarts inconfundible, y sintetiza muy bien la imagen general de la poderosa maga.
El pasaje a blanco y negro de las tiras originalmente publicadas a color en internet, no obstante, hubiese merecido algún trabajo para bajar un poco los tonos oscuros, pero, como ya dije, no queda afectada la inteligibilidad de los dibujos.

¿Quién debería comprar Lu Comics Nº3?
El estilo de chistes de Lu tiene influencias del humor de internet. Si disfrutás de ese tipo de humor con monigotes horrorosos, Lu Comics te va a resultar un grato descanso para la vista. Y admito que haber tenido una madre maestra ayuda a que los chistes sobre docencia me hagan más gracia.
Salvo que tu exigencia gráfica pida autores del nivel de Uderzo, Franquin, Peyo, Mort Walker, Dik Browne o, más acá, Bill Watterson, y pretendas guiones como los de Goscinny, Fontanarrosa o varios de los dibujantes previamente señalados, deberías poder disfrutar de Lu Comics tanto como yo.


MAX KING

domingo, 11 de febrero de 2018

El Antro #1

Revista formato 17 x 24, 44 páginas blanco y negro más tapa y contratapa a color, encuadernado a grapas. Autores varios, edita Vendetta Ediciones (https://www.facebook.com/vendettaediciones/)
La única razón por la que no quiero que Segesso haga las
 tapas de Fierro es para que siga haciendo las de El Antro.
¿Qué onda?
Resulta que cinco dibujantes y guionistas (entre ellos Leonardo Figueroa, creador de Lobizón, mastermind de la comiquería Hocus Pocus y personalidad destacada del mundo de los podcasts comiqueriles) habituales de la autoedición unieron fuerzas para crear una editorial que los contenga, Vendetta Ediciones, y a través de ella, sacar una publicación antológica que reúna lo mejor de las antologías grosas nacionales como El Tony, la primera etapa de Fierro, D'Artagnan o Frontera y otras influencias aventureras y superheróicas criollas como Cazador, El Caballero Rojo mezcladas con influencias del comic yanqui y europeo y el Pulp, y armaron una pequeña pero nutrida revista a la que, sin falsas pretensiones ni arrogancias altisonantes, le pusieron por nombre EL ANTRO.
El Antro es, en versión breve por la cantidad de páginas no tan generosa, lo que debería ser la Fierro actual si se la despojase de las (s)obras del comic nacional que no aportan una dirección e historia claros ni un aspecto gráfico inteligible. De hecho, lo que más me gusta es lo pareja que es, aún con estilos gráficos diversos.
En la misma tónica de la vieja Fierro, El Antro tiene historietas, ficción en prosa y notas, y un gran portadista, Ignacio Segesso.
Una evidente muestra de que se puede ser ecléctico sin perder calidad, nomás apuntando a que guión y dibujos sean claros y entretenidos sin por ello tratar de tonto al lector. Y el hecho de que las obras de El Antro están pensadas para El Antro y no para sacar compilatorios en Francia también ayuda a formar una identidad más propia y concisa.
 
¿De qué se trata?
El primer número de El Antro viene con tres historietas, todas episódicas, primeras partes de una historia que se ha de desarrollar en varios números. Es de esperar que Figueroa y amigos puedan ofrecer una periodicidad que no le juegue en contra a esta decisión de serializar. También acompañan a las historietas una ficción en prosa, una entrevista a un artista invitado y una sección sobre los autores de la revista.
Cada historieta tiene el fino detalle de tener una portada y una intro que nos pone en contexto.
Desglosemos:
BARATHRUM, por Leo Figueroa y Juan Pablo Massa
Ambientada en la primera guerra mundial, trata sobre un comando de élite ruso cuya misión es encontrar tres huevos Fabergé imbuidos de magia. ¿Por qué? Porque el general alemán Rennenkampf, mediante artes oscuras y un grimorio, terminó convocando una horda de demonios que se le fue de las manos y acabó alterando el curso de la guerra y de la realidad.
El episodio va presentando a los personajes, pero mediante la acción. El líder es Sergei Petrov, un sacerdote que ingresó al ejército. Lo acompaña una ecléctica pero peculiar selección de personajes con habilidades especiales: Sacha, un psíquico experto en tácticas subrepticias, Andrey, un brutal guerrero munido de un exoesqueleto mecánico a vapor, Oxana, una ágil experta en tiro con ballesta que se comunica con un hada escandinava de la suerte, una hechicera cuyo nombre se me escapa y Grigori, cuyo talento especial aún no llega a verse. La historieta es clara y el hecho de que no todos hayan sido presentados con nombre y habilidad muestra que la acción se da naturalmente y no se fuerzan las introducciones. Todos los personajes tienen visibilidad y se reconocen sin confusiones, lo que se agradece en un contexto tan de uniforme como es una guerra, y tan sucio como lo es la Gran Guerra, con invasión de demonios incluída, lo que va muy justamente acompañado del estilo de dibujo de Juan Pablo Massa, que es el dibujante cuyo estilo menos pide coloreado de todos los vistos en este tomo. Dan ganas de más.
CLAROSCURO,  Por Emiliano Urich y V von E.
Luego de padecer los intentos en el género del buen J.C. Quattordio en la Fierro, es más que grato hallar una mirada mucho más eficaz de los superhéroes argentos como es Claroscuro, un personaje que, de entrada, muestra dos cualidades para generar polémicas: es sumamente violento (a punto que las víctimas que salva se apiadan de sus victimarios) y habría tenido una relación homosexual oculta con un colega, Bondage, aunque no parece estar particularmente interesado en él. Un fotógrafo la pasa muy mal al tratar de venderle una foto reveladora de Bondage besando a Claroscuro a la galería de villanos del héroe, que se junta toda en un pintoresco bar llamado, muy adecuada y porteñamente, "La Gayola". Humor del que me gusta a mí, jugando con los clichés del género, con mofa pero con cariño, y un dibujo perfecto para la historia, que da muchas ganas de verse a todo color como en los comics gringos. De hecho, me hizo acordar mucho a la JLA de tiempos de Giffen y De Matteis, cuando DC tenía lugar para hacer divertidos y humanos a los superhéroes, algo así como es ahora el Marvel Cinematic Universe, pero sin esa relación abusiva entre el chiste y la acción de las últimas dos películas.
LA CRUZ DE ORO, de Gustavo Pereyra y Gustavo Jiménez
Tener un nivel parejo no significa que todas las obras sean iguales. Aunque uno pueda pensar que Barathrum y Claroscuro coinciden en tener varios personajes con "poderes", son obras diferentes. Y esa diferencia se profundiza en esta historieta de Pereyra y Jiménez, no solamente desde lo argumental, sino también desde lo gráfico.
La Cruz de Oro tiene un dibujo definitivamente humorístico, cercano al cartoon con un diseño de personajes excelente, muy claro y muy efectivo. Algunas páginas parecen evidenciar que la historieta está hecha para publicarse a todo color, especialmente por la falta de relleno en partes donde hay poca tinta invertida. El uso del thick & thin en ciertas viñetas es un poco confuso, pero el diseño de personajes es tan perfecto que lo compensa con creces, y la acción se entiende sin problemas. La intro que acompaña a esta pieza, como a las demás, nos anticipa algo del argumento de esta historia ambientada en el salvaje oeste norteamericano: Los Hermanos Plaga deben asaltar un tren en el que viaja un mago, Alan Grant (ignoro si es referencia al guionista de cinco geniales años de Batman o al personaje de Sam Neill en Jurassic Park, dado que también se referencia a una película, ya que el tren se dirige a Hill Valley, el pueblo de Marty McFly en Volver al Futuro) portando un objeto de gran poder, la Cruz de Oro del título. Cuando termina el episodio, recién empieza el robo, pero la intro ya nos explicó que Grant hará uso de sus habilidades para recuperar la pieza. Por ahora, Grant es amenazas y una cabeza muy suceptible a los culatazos. Veremos cómo evoluciona el guión de Pereyra.

Tras el plato fuerte, vienen los postres:
"TRANQUI, 120", por V von E.
Un relato en primera persona de una estudiante de ingeniería sobreviviendo en un contexto posapocalíptico, sin zombies pero con una luna rota. El relato, y bienvenido sea, es también tan parejo como las tres historietas, y cumple con los requisitos del resto de la revista: es claro, es entretenido y deja ganas de más sin tener que abusar de los "cliffhangers". Y también está pensado para esta revista, no para publicar en francés. Al cabo, dudo que los galos entiendan del todo qué es All Boys o la particular naturaleza de la geografía de la ciudad de Buenos Aires y por qué es irónico lo que le pasó a Puerto Madero.
Segesso completa el relato con una hermosa ilustración que sintetiza este primer cuento que tiene pinta de ser una saga aunque se haya resuelto en sí en esa página y monedas que ocupa.
ENTREVISTA A EMILIO BALCARCE, por Leo Figueroa.
Hablar de las peculiaridades de esta entrevista es poner más texto y ya puse demasiado. Mejor veamos la estructura de la sección, que más allá de la calidad del entrevistado (y la del entrevistador) es lo que me interesa destacar. Creo que es más que acertado y poco frecuente que, además de hablar con el entrevistado y del entrevistado, al final de la entrevista se ofrezca una bibliografía recomendada, compuesta de cuatro obras realizadas por el reporteado, para que el lector neófito consiga. Así la sección demuestra que no busca usar la entrevista para atraer lectores, sino para llevar a los lectores a lecturas más allá de la propia revista. En estos tiempos en que es tan tentadora la endogamia editorial, de publicaciones que solamente remiten a otras publicaciones de la misma editora, que Vendetta abra el juego recomendando obras de Deux, Fog of War e Historieteca habla de la vocación colectivista y solidaria del emprendimiento de Figueroa y sus socios. O sea, El Antro es una antología de historietas de una editorial que tiene otros productos propios, no es una publicación especializada. Es, me parece, algo para aplaudir.
FREAKSHOW
La cereza del postre es la lista de artistas que puso lo suyo en el número y algunos de sus otros méritos y señas particulares. Tiene pinta de ser una sección estable e inalterable, algo así como la página de introducción de personajes de los tomos de Asterix, pero al final de la revista.
¿Quién debería comprar El Antro?
Si te copaba la primera etapa de la primera etapa de Fierro, si te acordás con cariño de los tiempos de la Liga de la Justicia de Editorial Perfil (sí, esa en la que Accorsi debió traducir muy a su pesar Flash como Flushman, a causa de la existencia de una revista amarillista de actualidad que ostentaba el nombre del velocista escarlata como título), si te coparon los números viejos de El Tony que conseguiste en las casas de canje en la costa este verano, junto con los viejos números de Patoruzú, Isidoro o Patoruzito, El Antro es todo lo que esperabas. De hecho, es todo lo que yo esperé de la Fierro, y esperé, y esperé, y esperé, y esperé... Una muestra de que, bien elegidas las historietas y con la intención correcta, MENOS es MUCHÍSIMO MÁS.

Max King

domingo, 4 de febrero de 2018

Kokoro está embarazada

Fanzine fotmato A4 al medio (20,5 x 14,5 cm) 16 páginas blanco y negro más tapa.en tres tonos. Autor: Juampa Camarda (http://juampacamarda.tumblr.com/) Edita: Ediciones Noviembre (http://edicionesnoviembre.blogspot.com.ar/)


Kokoro es la perrita no antropomorfizada, aviso.

¿Qué onda?

Juampa Camarda tiene una perra ChowChow llamada Kokoro. Kokoro suele aparecer en su otra tira, un poco más autorreferencial o autobiográfica que ésta, llamada El Gordo Sin Remera, pero aquí, un poco en línea con Corré, Wachín! de Nahuel Sagárnaga, pero cambiando al alter ego de Juan, el gordo sin remera, y a su compañera por Dogo y Doga, los protagonistas de "Doce Películas comentadas por dos perros" (otra historieta de Juan publicada en similar formato y también por la editorial comandada por Brian Janchez), la cosa pasa por los dueños y su perra, o los perros y su mascota, o algo así.
Es que, sí, los dueños de Kokoro son perros también, pero antropomórficos, en un mundo de humanos. Si nadie se pregunta cómo pasa eso en otros universos dibujados, Camarda no piensa responderlo en el suyo, y me parece fenómeno.



Si esto no te saca una sonrisa, sos un
desalmado o probablemente un gato.

¿De qué se trata?
Dogo y Doga viven con su perrita chow chow Kokoro, y a raíz de un artículo que Dogo halló en Google, deciden llevar a la perrita de casi tres años a castrar, pero como bien indica el título (no es ningún spoiler) cambian de idea y optan por buscarle un novio a la pichicha.
Cada página de esta historieta tiene una impronta encantadora, ayudada por el estilo de Juampa, limpio, austero, pero muy, muy expresivo.
Aunque claramente ser dueño de un perro ayuda a reforzar ese efecto, además de reírme mucho, la sonrisa se me quedaba instalada entre remate y remate. Destila ternura, pero de un modo no empalagoso. Lo que les dije: ENCANTADOR.
Kokoro, a diferencia del Wachin de Sagárnaga, no habla, ni piensa, ni lleva en sus hombros la carga de la acción y el humor, pero no lo necesita. Le alcanza con ser así como es un perro. Son las reacciones y acciones de Dogo y Doga los que mueven los hilos de la comicidad y la trama con sus reacciones a lo que hace/no hace la perrita.


¿Quién debería comprar Kokoro Está Embarazada?
Obviamente, si has apreciado las otras obras sobre perros y sus dueños de Ediciones Noviembre, vas a adorar este breve pero disfrutable fanzín. Lo mismo si sos dueño de un perrito que adorás, si te gustan los pichichos, y si no sabías de esta historieta y te enganchaste con Juampa siguiendo sus posteos de Facebook de su tira El Gordo sin Remera. En serio, el laburo a conciencia, los recursos expresivos y el humor agudo de Juampa Camarda merecen que hagas tu aporte a la próxima bolsa de Alimento Balanceado de la encantadora Kokoro, que como buena It-dog, tiene su sitio (de la perra real, no la dibujada) en Instagram, @kokorothechowchow
¿Y Juampa? Bueno, Juampa no se conforma con el balanceado, al menos pagale un sánguche de chorizo, che, si no, va a terminar siendo el Flaco Sin Remera.

MAX KING